Si se ha instalado el sistema operativo Arch Linux con el entorno de escritorio MATE, es posible que la previsualización de los archivos de sonido no funcione correctamente. Esto es debido a la falta de ciertos paquetes o archivos.
Esto es muy útil si se está buscando una canción de la que no se sabe el título o autor y sin tener que abrir algún programa de sonido para escuchar cada archivo de sonido que se tenga almacenado.
En la siguiente imagen se puede ver como en una carpeta hay varios archivos de sonido, estando el cursor del ratón sobre uno de ellos.
Si no se escuchara el sonido, entonces se abre la terminal y se escribe lo que sigue:
De esta manera, se instalará los paquetes necesarios para la previsualización de los archivos de sonido. Hay que tener en cuenta que alguno de estos paquetes podrían estar instalados, por lo que se reinstalarían.
Finalizada la instalación y si no funciona la previsualización de los archivos de sonido, reinicia el sistema.
Se va a realizar una instalación limpia y básica del sistema operativo GNU/linux Debian en su versión 10, llamada Buster. Dicho sistema operativo ha demostrado su estabilidad y utilidad (en su rama estable), habiéndose creado muchas otras distribuciones basadas en Debian, como Ubuntu, Linux Mint Debian Edition (LMDE), Knoppix…
Este sistema operativo consta de tres ramas:
La rama «estable» es la que suele usarse para montar servidores, pudiéndose utilizar también para sistemas de escritorios.
La rama «en pruebas» o «testing» la utiliza aquellos que buscan tener el software más actualizado en sus escritorios, perdiendo algo de estabilidad.
La rama «inestable», conocida como «unstable» o «sid», es la versión de desarrollo y la que usan los desarrolladores del proyecto.
En esta instalación básica se va a usar la versión estable de Debian en una máquina virtual a fin de usarla en futuros tutoriales para montar servidores web, correo electrónico, FTP, etc… No cambia nada si la instalación se realiza directamente en un ordenador.
Para este tutorial se recomienda un disco duro con una capacidad mínima de 10 GB aproximadamente, a fin de realizar tres particiones, una para EFI/UEFI (512 MB aprox.), otra para la raíz del sistema (7 GB aprox.) y otra para el área de intercambio o SWAP (512 MB aprox.). Con esto será suficiente para montar un sistema operativo GNU/Linux en un disco duro sin otro sistema operativo, funcional y básico en modo terminal (de momento). Para conocimiento, las particiones mínimas para una instalación básica de un sistema GNU/Linux podrían ser dos, la partición raíz (/) y la partición SWAP.
Una vez iniciado el CD o USB con la imagen de Debian, aparece la siguiente pantalla:
La primera opción (Graphical install) es para una instalación gráfica, con soporte para el ratón, que facilita a los usuarios de sistemas Windows la tarea, aunque suele ser un poco más lenta. La opción “Install” es para una instalación en modo terminal. La suele utilizar los usuarios más avanzados.
Ambas opciones terminan con una instalación funcional del sistema operativo.
Se seleccionará la opción “Graphical install” para realizar una instalación de Debian.
Tras elegir el modo de instalación, aparecerá una pantalla en el que habrá que elegir el idioma que será usado para el proceso de instalación.
Después aparecerá otra ventana para elegir el país de ubicación.
A continuación se configura el idioma del teclado.
Comienza a detectar y configurar hardware de red así como a cargar componentes del instalador desde el CD / USB.
Se escribe el nombre que tendrá la máquina para poder ser identificada en la red. Puede ser el que se quiera. En esta instalación se ha puesto Debian-PC.
En la siguiente pantalla, se deja el nombre de dominio en blanco. Se puede configurar una vez terminada la instalación.
En este punto se configura los usuarios y contraseñas, comenzando por la contraseña del usuario root.
Y acto seguido el nombre completo del usuario Canarias Digital, pudiéndose escribir lo que interese a cada cual.
En este punto, se escribe el nombre de usuario para la nueva cuenta.
Y la contraseña del nuevo usuario.
Ahora le toca el turno a la zona horaria.
A partir de aquí comienza “lo más complicado” de la instalación del sistema operativo y es el particionado del disco duro. Elige “Manual” para realizar las particiones con el tamaño que uno quiera.
Luego señala donde aparezca el disco duro con el tamaño total. En esta imagen el disco duro tiene un tamaño de 9 GB aproximadamente.
Y se crea la tabla de particiones.
En este caso, se particionara el disco duro en tres partes, siendo la primera de ellas una partición EFI/UEFI con un tamaño de 512 MB.
Llegados a este punto hay que elegir el sistema de ficheros adecuado para la partición EFI/UEFI, por lo que se cambia el que está seleccionado haciendo doble clic sobre él.
Y aparece un listado de sistema de ficheros, debiéndose elegir la opción “Partición del sistema “EFI””.
Posteriormente se termina de definir la partición.
Y ya está la primera partición hecha.
Se crea la segunda partición, donde se instalará todo el sistema operativo. En este caso, la partición tendrá un tamaño de 7,5 GB.
Se crea la partición de 7,5 GB.
Y nuevamente se termina de definir la partición.
De esa manera queda particionado el disco duro hasta este momento, a falta de crear la partición del área de intercambio.
Se vuelve a crear otra partición para el área de intercambio.
Doble clic sobre el sistema de ficheros ext4 para cambiar el tipo de partición a “área de intercambio”.
De todas las opciones, se elige “Área de intercambio”.
Se termina de definir la partición.
Al finalizar queda el disco duro particionado de la siguiente forma.
Se escribe en el disco duro todos los cambios realizados .
Comienza la instalación del sistema base.
No se analiza otro CD / DVD o USB.
Se elige una réplica de Debian.
Se deja en blanco la configuración del proxy.
Comienza la descarga e instalación del sistema operativo.
No se desea participar en la encuesta de uso de paquetes.
Continua la selección e instalación de programas.
Para tener un sistema básico hay que desmarcar todas las opciones.
Y continua la instalación.
Instalar el gestor de arranque GRUB en el registro principal de arranque.
Se instala GRUB en el registro principal de arranque del disco duro.
Y al fin termina la instalación. Para reiniciar el equipo y que el sistema operativo arranque, antes hay que extraer el CD / USB desde el que se ha instalado Debian.
Tras reiniciar el sistema, se comprueba que todo esta correcto, entrando como usuario root e introduciendo la contraseña.
En principio el usuario root se debe usar para realizar configuraciones , actualizaciones e instalaciones de programas en el sistema operativo, siendo este usuario el que más privilegios tiene. Por tanto, se finaliza la sesión tecleando el comando “exit” para entrar posteriormente con el usuario creado antes, en este caso el usuario “canarias”. Para apagar el equipo
Para reiniciar y apagar el equipo, se debe hacer de momento con el usuario root mediante los comando “reboot” y “poweroff” respectivamente. Hay más, pero con estos de momento será suficiente.
Y esto es todo por el momento. En tutoriales posteriores se dará algunos comandos básicos para moverse por el sistema operativo recién instalado y se irán configurando distintos tipos de servidores, web, correo electrónico, FTP, así como la instalación de entornos de escritorios como KDE, Gnome, Mate, Cinnamon, XFCE …